Bienvenido, en este blog podrás encontrar temas derivados de la psicología criminal, si la curiosidad no te deja, este es el lugar indicado para ti, hablare de las causas del porque los criminales actúan de una forma determinada, Para determinar algo siempre tenemos que buscar muchas causas. Aquí veremos cuales son.
domingo, 11 de septiembre de 2016
sábado, 10 de septiembre de 2016
¿Que es la psicologia criminal?
Podemos resumir, según Marchiori que: “la Psicología criminal trata de averi-
esa conducta para él, porqué la idea de castigo no le atemoriza y le hace renunciar
de manera histórico-genética”.
la observación individual del sujeto antisocial extendiéndose hacia estudios de la
sean individuales o colectivos.
– Describir.
– Explicar.
– Predecir.
Es también, la Psicología criminal, partícipe de la síntesis criminológica, así que
es interdisciplinaria, apoyándose de la Biología, la Antropología, la Sociología, la Criminalística, la Victimología y la penología Criminológica.
Por tanto, es una ciencia social aplicada, que busca resolver problemas comple- jos, utilizando un método, y no actúa de forma aislada, ya que es interdisciplinar.
Libro ¨La psicologia criminal como ciencia¨Juan Jose Nicolas Guardiola http://repositorio.ucam.edu/jspui/bitstream/10952/582/1/Psicolog%C3%ADa%20criminal%20como%20ciencia.%20Juan%20José%20Nicolás%20Guardiola.pdf
la observación individual del sujeto antisocial extendiéndose hacia estudios de la
sean individuales o colectivos.
– Describir.
– Explicar.
– Predecir.
Es también, la Psicología criminal, partícipe de la síntesis criminológica, así que
es interdisciplinaria, apoyándose de la Biología, la Antropología, la Sociología, la Criminalística, la Victimología y la penología Criminológica.
Por tanto, es una ciencia social aplicada, que busca resolver problemas comple- jos, utilizando un método, y no actúa de forma aislada, ya que es interdisciplinar.
Libro ¨La psicologia criminal como ciencia¨Juan Jose Nicolas Guardiola http://repositorio.ucam.edu/jspui/bitstream/10952/582/1/Psicolog%C3%ADa%20criminal%20como%20ciencia.%20Juan%20José%20Nicolás%20Guardiola.pdf
viernes, 9 de septiembre de 2016
Enfoque del daño cerebral, enfoque Neuropsicologico
Libro http://bloguamx.byethost10.com/wp-content/uploads/2015/04/diagnostico-dac3b1o-cerebral.pdf?i=1
Alfredo Ardila y Feggy Ostrosky-Solis (1991)
Trillas, México, 2009.
La neuropsicología estudia las relaciones existentes entre la función cerebral y la conducta humana. Esta disciplina se basan el análisis sistemático de las alteraciones conductuales asociadas a trastornos de la actividad cerebral, provocados por enfermedad, daño o modificaciones experimentales (Hecáen y Albert, 1978).
Luria (1970) señala que la neuropsicología tiene dos objetivos fundamentales: 1.Delimitar las lesiones cerebrales causantes de las alteraciones conductuales específicas, se pueden desarrollar métodos de diagnóstico tempranos y efectuar la localización específica del daño, a fin de que este pueda tratarse lo antes posible. 2. La investigación neuropsicológica aporta un análisis factorial que conduce a un mejor entendimiento de los componentes de las funciones psicológicas complejas las cuales son producto de la actividad integrada de diferentes partes del cerebro.
La evaluación neuropsicológica no solo está orientada a decisiones diagnósticas, sino también al desarrollo de programas de rehabilitación. Al permitir el examen detallado de las deficiencias que subyacen a la lesión, hace posible el diseño de programas terapéuticos precisos.
La neuropsicología nos ha ubicado en un nuevo camino en lo que toca a la investigación en el cerebro humano. Gradualmente nos hemos percatado de que existe tanto una psicología con una neurología del aprendizaje, de manera que después de considerar estas dos dimensiones, nos solo se obtendrá una mejor comprensión del funcionamiento del cerebro humano, sino que se incrementará el conocimiento acerca de las técnicas de diagnóstico y rehabilitación.
Trillas, México, 2009.
La neuropsicología estudia las relaciones existentes entre la función cerebral y la conducta humana. Esta disciplina se basan el análisis sistemático de las alteraciones conductuales asociadas a trastornos de la actividad cerebral, provocados por enfermedad, daño o modificaciones experimentales (Hecáen y Albert, 1978).
Luria (1970) señala que la neuropsicología tiene dos objetivos fundamentales: 1.Delimitar las lesiones cerebrales causantes de las alteraciones conductuales específicas, se pueden desarrollar métodos de diagnóstico tempranos y efectuar la localización específica del daño, a fin de que este pueda tratarse lo antes posible. 2. La investigación neuropsicológica aporta un análisis factorial que conduce a un mejor entendimiento de los componentes de las funciones psicológicas complejas las cuales son producto de la actividad integrada de diferentes partes del cerebro.
La evaluación neuropsicológica no solo está orientada a decisiones diagnósticas, sino también al desarrollo de programas de rehabilitación. Al permitir el examen detallado de las deficiencias que subyacen a la lesión, hace posible el diseño de programas terapéuticos precisos.
La neuropsicología nos ha ubicado en un nuevo camino en lo que toca a la investigación en el cerebro humano. Gradualmente nos hemos percatado de que existe tanto una psicología con una neurología del aprendizaje, de manera que después de considerar estas dos dimensiones, nos solo se obtendrá una mejor comprensión del funcionamiento del cerebro humano, sino que se incrementará el conocimiento acerca de las técnicas de diagnóstico y rehabilitación.
jueves, 8 de septiembre de 2016
Psicopatia
La psicopatía es un trastorno divergente de la personalidad, diferenciado del TPAS y del TPL. Pinel lo describe como una forma de manía, sin el déficit cognitivo, pero con daños graves en la capacidad afectiva.
El psicópata no experimenta remordimientos por sus actos, y no repara en medios para conseguir sus metas.
La psicopatía se clasifica como un trastorno diferenciado del trastorno de personalidad antisocial (TPAS) y del trastorno de límite de personalidad (TPL). A pesar de la alta superposición sintomática entre la psicopatía y otros trastornos de personalidad, sus consecuencias para la sociedad, justifican su estudio como entidad independiente. Si bien la trasgresión es la constante en la conducta psicopática, no necesariamente, será lo suficientemente grave como para ser catalogada de conducta criminal. Babiak y Hare (2006) han publicado en su estudio “Psicópatas de cuello blanco”, que son sujetos de un elevado coeficiente intelectual, y que generalmente ocupan posiciones laborales de poder. La psicopatía no constituye un fenómeno moderno, encontramos antecedentes a lo largo de toda la evolución de la humanidad. La literatura nos proporciona abundantes muestras de ella. A su vez, se trata del primer trastorno psiquiátrico descrito. Pinel (1745-1826) precisa que se trataría de una forma de manía sin déficit en las facultades cognitivas, pero con un severo daño en la capacidad afectiva, lo que constituye una de las características descriptivas del psicópata. Su conducta aparenta locura, pero al examen mental, el sujeto aparece con sus facultades cognitivas intactas a pesar de su extrema frialdad emocional.
El psicópata no experimenta remordimientos por sus actos, y no repara en medios para conseguir sus metas.
La psicopatía se clasifica como un trastorno diferenciado del trastorno de personalidad antisocial (TPAS) y del trastorno de límite de personalidad (TPL). A pesar de la alta superposición sintomática entre la psicopatía y otros trastornos de personalidad, sus consecuencias para la sociedad, justifican su estudio como entidad independiente. Si bien la trasgresión es la constante en la conducta psicopática, no necesariamente, será lo suficientemente grave como para ser catalogada de conducta criminal. Babiak y Hare (2006) han publicado en su estudio “Psicópatas de cuello blanco”, que son sujetos de un elevado coeficiente intelectual, y que generalmente ocupan posiciones laborales de poder. La psicopatía no constituye un fenómeno moderno, encontramos antecedentes a lo largo de toda la evolución de la humanidad. La literatura nos proporciona abundantes muestras de ella. A su vez, se trata del primer trastorno psiquiátrico descrito. Pinel (1745-1826) precisa que se trataría de una forma de manía sin déficit en las facultades cognitivas, pero con un severo daño en la capacidad afectiva, lo que constituye una de las características descriptivas del psicópata. Su conducta aparenta locura, pero al examen mental, el sujeto aparece con sus facultades cognitivas intactas a pesar de su extrema frialdad emocional.
miércoles, 7 de septiembre de 2016
El miedo
No hace falta conocer el peligro para tener
miedo, de hecho los peligros
desconocidos son los que inspiran más temor
ALEJANDRO DUMAS
Muchos de nuestros actos como individuos o como pueblos están determinados por el
Muchos de nuestros actos como individuos o como pueblos están determinados por el
miedo: no nos pasamos un alto por temor
a ser multados, los hijos esconden sus tra-
vesuras de los ojos de sus madres por te-
mor a ser reprendidos, los subordinados
obedecen a sus superiores por temor a ser
despedidos, nuestros gobiernos aceptan
acuerdos a los que le someten poderes ma-
yores, y así la lista podría resultar inter-
minable.
Pero, ¿cuál o cuáles son las raíces del mie- do? Con los ejemplos anteriores podríamos fácilmente llegar a la conclusión de que éste nace ante aquello que tiene posibilidad de dominación sobre nosotros: poder de apo- car nuestras vidas, de disminuir nuestra fe- licidad, de generarnos dolor.
Sin embargo, no parece ser el temor al poderoso el único elemento que puede hacer estallar en nosotros actos violentos, el te- mor a lo diferente también es un factor relevante puesto que lo otro , los otros , no participan de nuestros esquemas de pen- samiento y, por tanto, provoca en nuestras mentes una especie de anarquía más pare- cida a la neurastenia. Lo diferente no se entiende y, así, no cabe la posibilidad de controlarlo; es la carencia absoluta de diá- logo, de reconciliación, de entendimiento. Nos coloca en el terreno de la inseguridad más desnuda y absoluta.
Al respecto Jean Delumeau, importante his- toriador francés, expresa lo siguiente: la inseguridad es símbolo de muerte y la se- guridad símbolo de vida (Delumeau, 2002: 25); o como observara Roger Caillois, es- critor y antropólogo francés, el miedo hu- mano, hijo de nuestra imaginación, no es uno sino múltiple, no es fijo sino perpetuamente cambiante . Así, la imaginación tiene mucho qué ver en la construcción que hacemos del enemigo. Pero un enemigo del que no podemos esbozar un rostro, que no somos capaces de imaginar, genera tal grado de inseguridad, y la inseguridad tal grado de temor, que caemos en estados caóticos de conciencia, en angustia, en neurastenia.
Pero, ¿cuál o cuáles son las raíces del mie- do? Con los ejemplos anteriores podríamos fácilmente llegar a la conclusión de que éste nace ante aquello que tiene posibilidad de dominación sobre nosotros: poder de apo- car nuestras vidas, de disminuir nuestra fe- licidad, de generarnos dolor.
Sin embargo, no parece ser el temor al poderoso el único elemento que puede hacer estallar en nosotros actos violentos, el te- mor a lo diferente también es un factor relevante puesto que lo otro , los otros , no participan de nuestros esquemas de pen- samiento y, por tanto, provoca en nuestras mentes una especie de anarquía más pare- cida a la neurastenia. Lo diferente no se entiende y, así, no cabe la posibilidad de controlarlo; es la carencia absoluta de diá- logo, de reconciliación, de entendimiento. Nos coloca en el terreno de la inseguridad más desnuda y absoluta.
Al respecto Jean Delumeau, importante his- toriador francés, expresa lo siguiente: la inseguridad es símbolo de muerte y la se- guridad símbolo de vida (Delumeau, 2002: 25); o como observara Roger Caillois, es- critor y antropólogo francés, el miedo hu- mano, hijo de nuestra imaginación, no es uno sino múltiple, no es fijo sino perpetuamente cambiante . Así, la imaginación tiene mucho qué ver en la construcción que hacemos del enemigo. Pero un enemigo del que no podemos esbozar un rostro, que no somos capaces de imaginar, genera tal grado de inseguridad, y la inseguridad tal grado de temor, que caemos en estados caóticos de conciencia, en angustia, en neurastenia.
La psiquiatría ha establecido una distinción entre el miedo y la angustia, Erick
Fromm en su obra Anatomía de la des-
tructividad humana expone: El miedo tiene un objeto determinado al que se puede
hacer frente. La angustia no lo tiene, y se
la vive como una espera dolorosa ante un
peligro tanto más temible cuanto que no
está claramente identificado (...) es un sentimiento global de inseguridad .
Pero en el contexto actual, ¿qué es lo que provoca tanta inseguridad? ¿por qué la gente vive en constante angustia? La respuesta parece estar en los trasfondos de lo que implica la modernidad y que ya Walter Benjamin nos adelantaba en mostrar: No hay objeto de la civilización que no sea al mismo tiempo, el producto de la barbarie (Benjamín, 1964:129). Es esa barbarie la que parece producir dicho estado. Walter Benjamín se refería a la oscura mano de los poderes ocultos que nos mantienen viviendo en un constante estado de emergencia , donde la violencia, en cualquiera de sus facetas, es la regla.
Libro ¨El miedo como arma de dominación y sus manifestaciones en la vida cotidiana estadounidense¨http://www.redalyc.org/pdf/676/67602024.pdf
Pero en el contexto actual, ¿qué es lo que provoca tanta inseguridad? ¿por qué la gente vive en constante angustia? La respuesta parece estar en los trasfondos de lo que implica la modernidad y que ya Walter Benjamin nos adelantaba en mostrar: No hay objeto de la civilización que no sea al mismo tiempo, el producto de la barbarie (Benjamín, 1964:129). Es esa barbarie la que parece producir dicho estado. Walter Benjamín se refería a la oscura mano de los poderes ocultos que nos mantienen viviendo en un constante estado de emergencia , donde la violencia, en cualquiera de sus facetas, es la regla.
Libro ¨El miedo como arma de dominación y sus manifestaciones en la vida cotidiana estadounidense¨http://www.redalyc.org/pdf/676/67602024.pdf
martes, 6 de septiembre de 2016
Según estudios...
¿Qué profesiones tienen más psicópatas y cuales tienen menos?
Según el articulo de Time Which Professions Have the Most Psychopaths? The Fewest?
Artículo de ¨TIME¨ http://time.com/32647/which-professions-have-the-most-psychopaths-the-fewest/
Según el articulo de Time Which Professions Have the Most Psychopaths? The Fewest?
Artículo de ¨TIME¨ http://time.com/32647/which-professions-have-the-most-psychopaths-the-fewest/
Señales para detectar a un psicópata
1.De acuerdo con un estudio australiano publicado recientemente en la revista Chemosensory Perception, las personas con tendencias psicópatas, además de Cerebro de un psicópata
ser manipuladoras, antisociales y adictas a las emociones fuertes, tienen un sentido del olfato atrofiado, algo que se atribuye a un funcionamiento defectuoso de la zona frontal del cerebro. En esta misma región de nuestra sesera residen las neuronas encargadas del control de los impulsos, la planificación y la capacidad de adaptar el comportamiento a las normas sociales.
2.Usando técnicas de neuroimagen, científicos del King's College de Londres (Reino Unido) han identificado diferencias cerebrales que podrían explicar desde un punto de vista biofisiológico la psicopatía. En concreto, han descubierto que las fibras nerviosas que conectan la amígdala -relacionada con el miedo- y la corteza orbitofrontal -implicada en la toma de decisiones- están ligeramente desestructuradas en los psicópatas, y que esta anomalía es más grave cuanto mayor es el desequilibrio mental.
3.El cerebro de los psicópatas está configurado de tal modo que buscan recompensas a cualquier coste, sin medir los riesgos, tal y como revelaba un estudio de la Universidad de Vanderbilt publicado en la revista Nature Neuroscience. Esto se debe a que hay un desequilibrio en el circuito de la dopamina, el neurotransmisor vinculado al placer, en una zona conocida como núcleo accumbens. De hecho, cuando un psicópata consume anfetaminas su cerebro libera cuatro veces más cantidad de dopamina que un cerebro sano.
4. Científicos de la Universidad de Cornell (EE UU) demostraron recientemente que existe cierto patrón en las palabras que usan los psicópatas durante una conversación. Concretamente, al hablar estos sujetos emplean el doble de términos relacionados con la alimentación, el sexo y el dinero que una persona normal. Y en su discurso apenas incluyen palabras que hagan referencia a la familia, la religión u otras "necesidades sociales". También suelen emplear más el tiempo pasado y hacen más pausas con sonidos como "um" que el resto de la población.
ser manipuladoras, antisociales y adictas a las emociones fuertes, tienen un sentido del olfato atrofiado, algo que se atribuye a un funcionamiento defectuoso de la zona frontal del cerebro. En esta misma región de nuestra sesera residen las neuronas encargadas del control de los impulsos, la planificación y la capacidad de adaptar el comportamiento a las normas sociales.
2.Usando técnicas de neuroimagen, científicos del King's College de Londres (Reino Unido) han identificado diferencias cerebrales que podrían explicar desde un punto de vista biofisiológico la psicopatía. En concreto, han descubierto que las fibras nerviosas que conectan la amígdala -relacionada con el miedo- y la corteza orbitofrontal -implicada en la toma de decisiones- están ligeramente desestructuradas en los psicópatas, y que esta anomalía es más grave cuanto mayor es el desequilibrio mental.
3.El cerebro de los psicópatas está configurado de tal modo que buscan recompensas a cualquier coste, sin medir los riesgos, tal y como revelaba un estudio de la Universidad de Vanderbilt publicado en la revista Nature Neuroscience. Esto se debe a que hay un desequilibrio en el circuito de la dopamina, el neurotransmisor vinculado al placer, en una zona conocida como núcleo accumbens. De hecho, cuando un psicópata consume anfetaminas su cerebro libera cuatro veces más cantidad de dopamina que un cerebro sano.
4. Científicos de la Universidad de Cornell (EE UU) demostraron recientemente que existe cierto patrón en las palabras que usan los psicópatas durante una conversación. Concretamente, al hablar estos sujetos emplean el doble de términos relacionados con la alimentación, el sexo y el dinero que una persona normal. Y en su discurso apenas incluyen palabras que hagan referencia a la familia, la religión u otras "necesidades sociales". También suelen emplear más el tiempo pasado y hacen más pausas con sonidos como "um" que el resto de la población.
lunes, 5 de septiembre de 2016
Causas Biológicas
Estamos en un momento histórico crucial donde la nueva tecnología investigativa habrá de ayudar a entender mejor -con evidencia clara y contundente- el verdadero espectro de posibilidades en variables de índole biológica, orgánica, congénitas o heredadas (tome por ejemplo el Proyecto del Genoma Humano).No creo que la biología pueda darnos la explicación total a la conducta criminal, pero igualmente creo que es obligatorio que todo profesional del campo de las Ciencias Sociales se actualice en estos nuevos descubrimientos e hipótesis, por cuanto es objetivo y competente reconocer aquellas condiciones fisiológicas, neurológicas, cromosómicas y anatómicas que puedan determinar algunos de los muchos casos de conducta criminal.La gran cantidad de estudios para explicar la criminalidad en la perspectiva biológica no es un evento, moda o patrón nuevo. No obstante, hoy día las investigaciones giran explorando nuevas, o más específicas, variables que incluyen una variedad enorme de factores físicos tales como los niveles alterados de serotonina (perspectiva bioquímica; desbalances químicos), alteraciones en el lóbulo frontal, ADD (desorden de déficit de atención), niveles altos de testosterona combinados con niveles bajos de serotonina, niveles bajos de colesterol, el efecto en general de los andrógenos, el efecto de diversas drogas auto-inducidas(ingeridas), los efectos de las dietas (enfoque nutricional), alteraciones por cobre y zinc, el efecto de traumas y accidentes, el efecto de traumas en guerras o eventos de estrés en desastres naturales (síndrome post-traumático), el efecto de la contaminación ambiental y las toxinas, hiperactividad, problemas cognitivos, el efecto del tabaquismo en la madre sobre los hijos (as), efecto del ácido úrico, la predisposición genética, y la relación entre estados emocionales alterados (depresión y ansiedad) y la conducta criminal, entre muchos otros.
domingo, 4 de septiembre de 2016
El efecto de golpes-traumas y alteraciones del lóbulo frontal
Alan Rosembaum (1994) realizó un estudio en los que descubre que los traumas cerebrales anteceden cambios de conducta predisponiendo hacia un incremento en violencia. Muchas de estas lesiones fueron adquiridas en la infancia tanto bajo juegos como en accidentes o producto de maltrato infantil. Su estudio fue realizado con 53 hombres que golpeaban a sus esposas, 45 hombres no-violentos y felizmente casados, y 32 hombres no-violentos pero infelizmente casados. 50% de los agresores habían sufrido alguna lesión en la cabeza previa a sus patrones de violencia doméstica.De otra parte, Antonio Damasio (1995) sugiere que daños al lóbulo frontal a nivel de la corteza cerebral puede evitar que la persona pueda formarse evaluaciones de valor positivo o negativo al crear imágenes y representaciones sobre los resultados, repercusiones y consecuencias futuras de acciones al presente creando las bases de ciertas conductas sociopáticas. Estudios de Antoine Bechara (1994) confirman la correlación entre lesiones de la corteza en el lóbulo frontal y conductas peligrosas tales como “hacer daño solo por divertirse”.Estudios con PET (tomografía de emisiones positrónicas; mide el insumo de glucosa al cerebro) realizados por Adrian Raine (1994) demuestran que niveles bajo de glucosa a la corteza pre-frontal son frecuentes en los asesinos (sus estudios son preliminares; la muestra fue de 22 asesinos confesos con 22 no-asesinos de control). Bajos niveles de glucosa están asociados con perdida de auto-control, impulsividad, falta de tacto, incapacidad de modificar o inhibir conducta, pobre juicio social. Los autores de este estudio plantean que esta condición orgánica debe interactuar con condiciones negativas del ambiente para que la persona entonces cree un estilo de vida y personalidad delincuente y violenta de forma más o menos permanente
Alan Rosembaum (1994) realizó un estudio en los que descubre que los traumas cerebrales anteceden cambios de conducta predisponiendo hacia un incremento en violencia. Muchas de estas lesiones fueron adquiridas en la infancia tanto bajo juegos como en accidentes o producto de maltrato infantil. Su estudio fue realizado con 53 hombres que golpeaban a sus esposas, 45 hombres no-violentos y felizmente casados, y 32 hombres no-violentos pero infelizmente casados. 50% de los agresores habían sufrido alguna lesión en la cabeza previa a sus patrones de violencia doméstica.De otra parte, Antonio Damasio (1995) sugiere que daños al lóbulo frontal a nivel de la corteza cerebral puede evitar que la persona pueda formarse evaluaciones de valor positivo o negativo al crear imágenes y representaciones sobre los resultados, repercusiones y consecuencias futuras de acciones al presente creando las bases de ciertas conductas sociopáticas. Estudios de Antoine Bechara (1994) confirman la correlación entre lesiones de la corteza en el lóbulo frontal y conductas peligrosas tales como “hacer daño solo por divertirse”.Estudios con PET (tomografía de emisiones positrónicas; mide el insumo de glucosa al cerebro) realizados por Adrian Raine (1994) demuestran que niveles bajo de glucosa a la corteza pre-frontal son frecuentes en los asesinos (sus estudios son preliminares; la muestra fue de 22 asesinos confesos con 22 no-asesinos de control). Bajos niveles de glucosa están asociados con perdida de auto-control, impulsividad, falta de tacto, incapacidad de modificar o inhibir conducta, pobre juicio social. Los autores de este estudio plantean que esta condición orgánica debe interactuar con condiciones negativas del ambiente para que la persona entonces cree un estilo de vida y personalidad delincuente y violenta de forma más o menos permanente
sábado, 3 de septiembre de 2016
Efectos de medicamentos-drogas
Medicamentos, legalmente recetados por médicos como parte de tratamiento a condiciones como epilepsia, pueden tener efectos negativos aumentando la irritabilidad, la actividad y el desajuste emocional. Tal es el caso de medicinas como Mysoline que es recetada como anticonvulsivo (1994).
Medicamentos, legalmente recetados por médicos como parte de tratamiento a condiciones como epilepsia, pueden tener efectos negativos aumentando la irritabilidad, la actividad y el desajuste emocional. Tal es el caso de medicinas como Mysoline que es recetada como anticonvulsivo (1994).
viernes, 2 de septiembre de 2016
La sabiduría de los psicopatas
Por Kevin Dutton
“—Creo que lo más importante de los psicópatas —dice Rossi—, es el hecho de que por una parte son muy normales, igual que todos nosotros... pero, por otra parte, son muy distintos. Gacy incluso se vestía de payaso y actuaba en fiestas infantiles... Eso es lo que pasa con los psicópatas. Exteriormente parecen normales y corrientes. Pero si miras debajo de la superficie, en los huecos que hay debajo de su casa, digamos, nunca sabes lo que te puedes encontrar. ¨
“—Creo que lo más importante de los psicópatas —dice Rossi—, es el hecho de que por una parte son muy normales, igual que todos nosotros... pero, por otra parte, son muy distintos. Gacy incluso se vestía de payaso y actuaba en fiestas infantiles... Eso es lo que pasa con los psicópatas. Exteriormente parecen normales y corrientes. Pero si miras debajo de la superficie, en los huecos que hay debajo de su casa, digamos, nunca sabes lo que te puedes encontrar. ¨
jueves, 1 de septiembre de 2016
Vagonología
Joshua Greene, psicólogo de la Universidad de Harvard, pasó los últimos años observando cómo descifraban los psicópatas los dilemas morales, cómo respondían sus cerebros dentro de las diferentes cámaras de descompresión éticas. Dio con algo interesante. Lejos de ser uniforme, la empatía es esquizofrénica. Hay dos variedades distintas: caliente y fría. Consideremos, por ejemplo, el siguiente acertijo
(caso 1), propuesto en primer lugar por la filósofa Philippa
Un vagón de ferrocarril corre por unas vías. En su camino se encuentran cinco personas atrapadas, que no pueden escapar. Afortunadamente, usted puede darle a un interruptor que desviará el vagón a una vía muerta, apartando así el vagón de las cinco personas... pero con un precio. Hay otra persona atrapada también en ese desvío, y el vagón matará a esa persona. ¿Debería usted darle al interruptor? La mayoría de nosotros experimenta pocas dificultades a la hora de decidir qué hacer en esa situación. Aunque la perspectiva de darle al interruptor no es agradable, la opción utilitaria (matar solo a una persona en lugar de cinco) representa «la opción menos mala». ¿No? Ahora consideremos la siguiente variante
(caso 2), propuesta por la filósofa Judith Jarvis Thomson:
Como antes, un vagón de ferrocarril va descontrolado por una vía hacia cinco personas. Pero esta vez, usted se encuentra de pie detrás de un desconocido muy corpulento en una pasarela peatonal por encima de las vías. La única forma de salvar a las cinco personas es arrojar al desconocido a las vías. Éste morirá al caer, desde luego. Pero su corpulencia considerable bloqueará el vagón, salvando así cinco vidas. ¿Debería usted empujarle? Aquí podríamos decir que nos encontramos ante un dilema «real». Aunque el recuento de vidas es exactamente el mismo que en el primer ejemplo (cinco a una), jugar de esta manera nos pone un poco más cautos y nerviosos. ¿Por qué? Joshua Greene cree que tiene la respuesta. Lo que pasa es que afecta a regiones distintas del cerebro. El caso 1, afirma, es lo que podríamos llamar un dilema moral «impersonal». Se aloja en esas zonas del cerebro, el córtex prefrontal y el córtex parietal posterior (en particular el córtex paracingulado anterior, el polo temporal y el surco temporal superior), principalmente implicados en nuestra experiencia objetiva de la empatía «fría»: el razonamiento y el pensamiento racional. El caso 2, por otra parte, es lo que podríamos llamar un dilema moral «personal», y llama a la puerta del centro de emociones del cerebro, conocido como amígdala: el circuito de la empatía «caliente». Como la mayoría de los miembros normales de la población, los psicópatas no tienen demasiado problema a la hora de resolver el dilema presentado en el caso 1. Dan al interruptor y el tren se desvía, matando a una sola persona en lugar de matar a cinco. Sin embargo (y aquí es donde la cosa se pone interesante), a diferencia de la gente normal tampoco tendrían demasiados problemas en el caso 2. Los psicópatas se quedarían muy tranquilos empujando al tipo gordo a las vías sin pestañear, si no queda más remedio. Pag.35,36,37
domingo, 28 de agosto de 2016
El Miedo
LAS RAÍCES DEL MIEDO
No hace falta conocer el peligro para tener miedo, de hecho los peligros desconocidos son los que inspiran más temor ALEJANDRO DUMAS
Muchos de nuestros actos como individuos o como pueblos están determinados por el
No hace falta conocer el peligro para tener miedo, de hecho los peligros desconocidos son los que inspiran más temor ALEJANDRO DUMAS
Muchos de nuestros actos como individuos o como pueblos están determinados por el
miedo: no nos pasamos un alto por temor
a ser multados, los hijos esconden sus tra-
vesuras de los ojos de sus madres por te-
mor a ser reprendidos, los subordinados
obedecen a sus superiores por temor a ser
despedidos, nuestros gobiernos aceptan
acuerdos a los que le someten poderes ma-
yores, y así la lista podría resultar inter-
minable.
Pero, ¿cuál o cuáles son las raíces del miedo? Con los ejemplos anteriores podríamos fácilmente llegar a la conclusión de que éste nace ante aquello que tiene posibilidad de dominación sobre nosotros: poder de apo- car nuestras vidas, de disminuir nuestra fe- licidad, de generarnos dolor.
Sin embargo, no parece ser el temor al po- deroso el único elemento que puede hacer estallar en nosotros actos violentos, el te- mor a lo diferente también es un factor relevante puesto que lo otro , los otros , no participan de nuestros esquemas de pen- samiento y, por tanto, provoca en nuestras mentes una especie de anarquía más pare- cida a la neurastenia. Lo diferente no se entiende y, así, no cabe la posibilidad de controlarlo; es la carencia absoluta de diá- logo, de reconciliación, de entendimiento. Nos coloca en el terreno de la inseguridad más desnuda y absoluta.
Al respecto Jean Delumeau, importante his- toriador francés, expresa lo siguiente: la inseguridad es símbolo de muerte y la se- guridad símbolo de vida (Delumeau, 2002: 25); o como observara Roger Caillois, es- critor y antropólogo francés, el miedo hu- mano, hijo de nuestra imaginación, no es uno sino múltiple, no es fijo sino perpetuamente cambiante. Así, la imaginación tiene mucho qué ver en la construcción que hacemos del enemigo. Pero un enemigo del que no podemos esbozar un rostro, que no somos capaces de ima- ginar, genera tal grado de inseguridad, y la inseguridad tal grado de temor, que caemos en estados caóticos de conciencia, en angustia, en neurastenia.
Pero, ¿cuál o cuáles son las raíces del miedo? Con los ejemplos anteriores podríamos fácilmente llegar a la conclusión de que éste nace ante aquello que tiene posibilidad de dominación sobre nosotros: poder de apo- car nuestras vidas, de disminuir nuestra fe- licidad, de generarnos dolor.
Sin embargo, no parece ser el temor al po- deroso el único elemento que puede hacer estallar en nosotros actos violentos, el te- mor a lo diferente también es un factor relevante puesto que lo otro , los otros , no participan de nuestros esquemas de pen- samiento y, por tanto, provoca en nuestras mentes una especie de anarquía más pare- cida a la neurastenia. Lo diferente no se entiende y, así, no cabe la posibilidad de controlarlo; es la carencia absoluta de diá- logo, de reconciliación, de entendimiento. Nos coloca en el terreno de la inseguridad más desnuda y absoluta.
Al respecto Jean Delumeau, importante his- toriador francés, expresa lo siguiente: la inseguridad es símbolo de muerte y la se- guridad símbolo de vida (Delumeau, 2002: 25); o como observara Roger Caillois, es- critor y antropólogo francés, el miedo hu- mano, hijo de nuestra imaginación, no es uno sino múltiple, no es fijo sino perpetuamente cambiante. Así, la imaginación tiene mucho qué ver en la construcción que hacemos del enemigo. Pero un enemigo del que no podemos esbozar un rostro, que no somos capaces de ima- ginar, genera tal grado de inseguridad, y la inseguridad tal grado de temor, que caemos en estados caóticos de conciencia, en angustia, en neurastenia.
La psiquiatría ha establecido una distinción entre el miedo y la angustia, Erick
Fromm en su obra Anatomía de la desructividad humana expone: El miedo tiene un objeto determinado al que se puede
hacer frente. La angustia no lo tiene, y se
la vive como una espera dolorosa ante un
peligro tanto más temible cuanto que no
está claramente identificado (...) es un sentimiento global de inseguridad.
Pero en el contexto actual, ¿qué es lo que provoca tanta inseguridad? ¿por qué la gente vive en constante angustia? La res- puesta parece estar en los trasfondos de lo que implica la modernidad y que ya Walter Benjamin nos adelantaba en mostrar: No hay objeto de la civilización que no sea al mismo tiempo, el producto de la barbarie (Benjamín, 1964:129). Es esa barbarie la que parece producir dicho estado. Walter Benjamín se refería a la oscura mano de los poderes ocultos que nos mantienen viviendo en un constante estado de emergencia , donde la violen- cia, en cualquiera de sus facetas, es la regla. Libro ¨El miedo como arma de dominación y sus manifestaciones en la vida cotidiana estadounidense¨http://bloguamx.byethost10.com/wp-content/uploads/2015/04/diagnostico-dac3b1o-cerebral.pdf?i=1
Pero en el contexto actual, ¿qué es lo que provoca tanta inseguridad? ¿por qué la gente vive en constante angustia? La res- puesta parece estar en los trasfondos de lo que implica la modernidad y que ya Walter Benjamin nos adelantaba en mostrar: No hay objeto de la civilización que no sea al mismo tiempo, el producto de la barbarie (Benjamín, 1964:129). Es esa barbarie la que parece producir dicho estado. Walter Benjamín se refería a la oscura mano de los poderes ocultos que nos mantienen viviendo en un constante estado de emergencia , donde la violen- cia, en cualquiera de sus facetas, es la regla. Libro ¨El miedo como arma de dominación y sus manifestaciones en la vida cotidiana estadounidense¨http://bloguamx.byethost10.com/wp-content/uploads/2015/04/diagnostico-dac3b1o-cerebral.pdf?i=1
sábado, 27 de agosto de 2016
¿ Porque el miedo es importante para el tema?
Estudios han demostrado que el miedo esta ausente en los Psicopatas pues el lóbulo parental que se encarga de determinar la causa y efecto no esta activada.
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